Allá a donde vamos, siempre hay alguien (nosotros también muchas veces) que no puede evitar pensar "ese tiene el pelo demasiado largo", "esa va vestida muy antiguo", "esos son muy raros"...¿por qué?, ¿porque no son o no aparentan ser como lo normal?
¿Qué es normal?
¿Quién determina lo que es normal y lo que no?
¿Por qué se determina lo que está a la moda y lo que está fuera de lugar, lo que ya no gusta a nadie?
Muchas veces nos mueven las apariencias, yo misma, aunque no lo quiera, muchas veces pienso cosas así... y sé que me equivoco, y mucho.
Y esas apariencias no solo afectan a los que vemos, sino también a nosotros mismos, ¿cuántas veces nos hemos preocupado de ir bien, de ir de forma que nadie piense mal?¿cuántas veces no hemos ignorado la opinión de los demás respecto a nuestro vestuario, nuestra forma de ser...?
Hoy me detengo a pensarlo... y hoy me doy cuenta de lo mucho que he perdido por ello, las veces que he podido reprimir lo que soy, quien soy; y las veces que me he perdido conocer a grandes personas solo por su aspecto, solo por la apariencia...
Hoy me pregunto por qué nos es a veces tan tremendamente difícil se un poco "ciegos" con el aspecto de las personas o, como decíamos en el campamento, "buscar con el corazón" y no dejar que nuestros ojos nos engañen, y dejar a nuestro corazón actuar.
Hoy más que nunca pienso "la belleza está en los ojos del que mira", porque la belleza es tremendamente relativa y no podemos pensar que ya está determinada...
Hoy vuelvo tras unos meses sin escribir aquí, espero que todo os vaya genia. Muchos besitos!
Sonríe, aunque todos te estén mirando...
Marta=)
